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lunes, 11 de abril de 2016

¿Està Uber en un mercado competitivo?

Fuente: http://www.dineroenimagen.com/2016-04-08/71217

Tope a tarifas de Uber: ¿Qué dice la teoría económica?

Mientras algunos alegan que la empresa abusó, otros defienden el libre mercado, y esto tendrá consecuencias
POR:  Marco Antonio Gómez Lovera Última actualización 08 / Abril / 2016
Economista por la Universidad Panamericana. Con experiencia en el análisis de indicadores económicos de México. 



CIUDAD DE MÉXICO.- Tras la Contingencia Ambiental y el incremento que tuvieron las tarifas de Uber el miércoles 6 de abril, algo tan sencillo como la oferta y la demanda se ha popularizado en redes sociales. Mientras algunos alegan que la empresa abusó, otros defienden el libre mercado.
Esto ha hecho que el gobierno de la Ciudad de México reaccione y analice topar las tarifas del servicio.
¿Qué fue lo que pasó y qué consecuencias tendrá? Lo explicamos a continuación.

La teoría

Recordemos que el mercado se rige por la oferta de un bien y la demanda del mismo. El lugar donde las dos encuentran equilibrio es el precio y su relevancia radica en que permite que exista tal.
Si la demanda de un bien aumenta y la oferta se mantiene, el precio subirá y obligará a salir del mercado a quienes no están dispuestos a pagarlo. Esto llevará a la nueva demanda y la oferta a un nuevo equilibrio.
Por el otro lado, el de la oferta, si ésta por alguna razón disminuye y la demanda se mantiene constante, el precio también subirá, en un intento por reducir a los participantes en el mercado y encontrar un nuevo equilibrio.
Todos los mercados se encuentran sujetos a estas reglas, pero en el caso de Uber la tarifa dinámica hace que ese proceso de reequilibrio del mercado sea más rápido y más evidente.

La Contingencia

La Contingencia fue una situación particular porque implicó el movimiento tanto de la demanda como de la oferta.
El parque vehicular de la Ciudad de México y zonas conurbadas se redujo en aproximadamente 40% con el doble Hoy No Circula. Esto hizo que la demanda por servicios de transporte distintos al auto particular se incrementa, uno de éstos es Uber.
Pero al mismo tiempo algunos conductores del servicio se vieron obligados a no circular, pues no estuvieron exentos de la medida. Esto redujo la oferta de coches operando Uber.
Como vimos en la parte teórica, un aumento en la demanda incrementa el precio, al igual que una reducción de la oferta. Y cuando ambas confluyen, se puede esperar algo peor.
En esta representación gráfica la línea de oferta es casi recta porque la cantidad de coches disponibles no puede moverse tan rápidamente.

El tope a la tarifa

La noche del miércoles Uber dijo en un comunicado que la razón para no topar la tarifa, como lo hizo en la Contingencia de semanas antes, es que resulta contraproducente.
Lo que ocurrió fue que 30 mil personas, en un solo día, no encontraron autos disponibles. Esto es treinta veces más del promedio semanal", dice el comunicado.
Esto está plenamente sustentado por la teoría económica. Si ante un incremento de la demanda se le impone un límite a lo que el precio puede subir, lo que se genera es escasez del servicio, por lo que consumidores no verán satisfechas sus necesidades.
¿Qué pasaría si el tope a la tarifa no viene de una decisión de la empresa sino del gobierno? Habría efectos negativos porque:
  • Se mantiene la escasez del servicio e insatisfacción de necesidades de los consumidores.
  • Se desincentiva la entrada de competidores porque la ganancia sería limitada. 
  • Se reduce la confianza en el sector por la intervención del gobierno.

¿Es un monopolio?

Uno de los principales reclamos contra Uber es que se comportó como un monopolio que pudo cobrar tarifas extraordinarias en un momento de necesidad. ¿Es entonces un monopolio?
Primero hay que tener en cuenta que no todo monopolio es malo, hay ocasiones en las que una empresa se vuelve tan eficiente que desplaza a sus competidores y se convierte en la mejor opción para el mercado. Esto se llama monopolio natural.
En el caso del mercado en el que opera Uber hay tres consideraciones:
  • Tiene por lo menos dos competidores directo: Lyft y Buggy Rides.
  • Hay servicios que ofrecen ventajas similares en cuanto a pago y seguridad, como EasyTaxi y Cabify.
  • Es un mercado demasiado nuevo.

Las opciones a Uber

Además, aunque Uber tiene su propio mercado, no es la única solución para satisfacer la demanda por transporte. En la teoría económica estas alternativas son llamados bienes sustitutos y son uno de los elementos que tienen incidencia sobre la demanda.
En este caso el exceso de demanda por Uber se pudo haber satisfecho por esos bienes sustitutos como taxis, Metro, camiones, Metrobús o Ecobici. Pero si el consumidor juzga que el precio, extensión y calidad no son suficientes como para pasar a otra opción, y decide pagar el aumento de precio generado por un exceso de demanda, entonces el problema no es Uber.
La lógica económica dice que en lugar de buscar topar una tarifa en beneficio del consumidor, se debería incentivar la entrada de competidores y mejorar las condiciones de las alternativas. Porque el tope a la tarifa no soluciona el problema de exceso de demanda, mientras que lo otro sí.

Competencia

Finalmente, se ha dicho que Uber mueve sus tarifas para atraer consumidores y dejar fuera a su competencia directa e indirecta. Ante esta sospecha, el tema de evaluación y regulación de tarifas debería ser atraído por organismo que vigilan la competencia económica, no de una dependencia del Poder Ejecutivo

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http://www.elfinanciero.com.mx/opinion/aplausos-a-uber-por-leccion-de-capitalismo.html

Aplausos a Uber por lección de capitalismo

 
 

Uber
Uber ha dado una gran lección de capitalismo de libre mercado esta semana al haber instrumentado la llamada 'tarifa dinámica' por medio de la cual se multiplica el cobro de su servicio por un múltiplo que refleja las veces que los usuarios solicitan un auto y la carencia de las unidades en circulación.
En otras palabras, Uber cobró de acuerdo con las leyes de la oferta y demanda, y mostró en una sesión lo que ni el sistema educativo ni las autoridades han podido insertar en nuestra conciencia: las cosas cuestan, y cuestan más si más gente las requiere.

Es totalmente injusto el fenómeno de troleo contra Uber por haber cobrado más el miércoles, durante el doble Hoy No Circula. Lo único que hizo la firma fue habilitar un algoritmo que calculara la escasez relativa del servicio en diferentes momentos del día, y cobrar una tarifa que reflejara esa escasez.

Los mexicanos no estamos acostumbrados a funcionar con los principios del libre mercado. Si el huevo sube de precio, la Profeco sale a decir que verificará que no haya abusos. Si el precio del kilo de tortilla se dispara, se monta una discusión nacional que pone en el ojo del huracán a los 'acaparadores'. Si se acercan las vacaciones, el gobierno dice que revisará precios de hoteles…

Todo esto genera una nube de incomprensión acerca del funcionamiento del sistema de precios. A la gente se le alimenta la idea de que los precios deben ser 'justos' y que, de no serlo, el gobierno sale a defendernos. Muchos mexicanos viven confundidos, pensando que 'alguien' ejerce una especie de control sobre todo el sistema.

Uber fracturó este velo el miércoles, al cobrar su tarifa dinámica. Sin embargo, el prejuicio es tan profundo, que aquellos que aplaudieron su llegada hace dos años a la CDMX, ahora se fueron contra la empresa, destrozando injustamente su reputación. De abusiva no la bajaron.

El problema de fondo es que en México nadie se atreve a decir las cosas como son. Nadie en el gobierno de Miguel Mancera ha tenido el atrevimiento de romper el monopolio del transporte masivo concesionado. El propio Mancera ha alimentado la lógica de precios controlados al accionar palancas como los autobuses gratuitos, o al acordar con los taxistas la reducción del 'banderazo'. Nada ayudan sus solicitudes para que el gobierno federal no 'abandone' a la Ciudad. Todo esto alimenta la idea de que el servicio de transporte debe tener un control de precios. Pero ya vimos que es insostenible. Uber le puso precio real al transporte en la ciudad.

La movilidad en la CDMX experimentó esta semana lo que la paridad cambiaria peso-dólar sufrió en diciembre de 1994, cuando del dólar controlado tuvimos que pasar a un sistema de libre flotación.

Twitter: @SOYCarlosMota

Correo: motacarlos100@gmail.com
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 Observaciones a este y otros artìculos que suponen que el mercado de Uber es competitivo:
¿Aplausos a Uber? ¿Uber funciona con los pricipios del libre mercado? Ejemplo de como ser economista -y columnista- no està excento de cometer equivocaciones.
No se puede hablar de mercado de libre competencia y de que operen libremente las leyes del mercado cuando:
- se tienen mercados segmentados (pocos oferentes si se acepta que es un servicio de transporte privado -concepto discuitible de por si- y muchos demandantes)
- se fija por la empresa un precio tope efectivo (la tarifa base mìnima),
- se determinan tarifas con discriminaciòn de precios intertermporales por intensidad de uso (tarifas dinàmicas)
- el algoritmo que fija las tarifas dinàmicas lo determina el oferente y no el conjunto del mercado.
-hay informaciòn asimètrica sobre los pocos oferentes del segmento de mercado y la demanda es pràcticamente inelàstica al muy corto plazo
¿En què país desarrollado, donde priva la eficiencia económica,  Uber  opera  sin regulaciones de mercado? 
¿Se define que Uber es un servicio privado porque se realiza mediante una aplicación de  internet y con ella se anuncia la tarifa o precio,  pero si uno llama por  teléfono a un sitio de taxis y èste tambièn señala la tarifa, què diferencia hay con Uber?.   
En un mercado competitivo los dueños de los autos y no Uber deberían de fijar junto con el conjunto de su demanda las tarifas, en realidad Uber funciona igual que un servicio concesionado de transporte público, líneas de camiones,  taxis, etc.  A diferencia de los propietarios organizados por Uber, el consumidor o usuario no puede organizarse sino es por instituciones de protecciòn al consumidor y sus gobernantes.
Si  Uber  hubiera sido igual de imparcial en la comunicación hacia  sus usuarios, seguramente èstos  habrían  planeado mejor sus alternativas en caso de contingencia.
Se dice que Uber es un servicio diferente al servicio de taxis, un servicio de transporte privado, pero si es asì porquè  se dice que los usuarios han tenido que recurrir a èl por la mala calidad del servicio de transporte público y la inseguridad que priva en èl. Si Uber no forma parte de este mercado entonces porque se le menciona  para justificar su uso.
Si se quiere justificar un mercado de libre competencia porquè no permitir que sin regulación alguna, cada persona que disponga de un auto anuncie por alguna herramienta de las TIC`s su disponibilidad  a prestar servicios de transporte privado.
En el caso de la contingencia, si los usuarios  efectivos que pagaron el precio con la tarifa dinámica hubieran considerado que la tarifa  que pagaron equivalía al valor real del servicio, entonces no se hubieran quejado o levantado una demanda ante la Profeco o el gob del de la ciudad
La devolución de los sobreprecios en efectivo o en especie por parte de Uber no obedeció tanto a la presión del  gobierno de la ciudad sino al desprestigio ante sus usuarios y la opinión pública que podría aplicarle un castigo reduciendo  su  demanda futura.
El servicio es en si diferenciado porque no todos tienen las mismas ubicaciones y accesos a fuentes alternativas de transporte. Y en un caso de contingencia de menos de un dìa, al usuario le resulta muy costoso la búsqueda de alternativas. En esta circunstancia, el verdadero costo de oportunidad de un usuario que pagò la tarifà dinámica no era el uso de otro medio de transporte alternativo, sino el costo de llegar tarde a sus actividades (trabajo-despido; escuela - aplicar un examen; cita a médico - recalendarizar o posponer un cita, etc.).

En realidad Uber es parte de un mercado oligopólico con una demanda relativamente inelàstica y por ende tiene poder de mercado y por tanto poder influir  significativamente en la determinaciòn del precio